Con un lenguaje de gran fuerza y sencillez, El viejo y el mar narra la historia de un viejo pescador cubano a quien la suerte parece haber abandonado, y del desafío mayúsculo al que se enfrenta: la batalla despiadada y sin tregua con un pez gigantesco en las aguas del golfo. Escrito en 1952, por encargo de la revista Life, este relato lo confirmó como uno de los escritores más significativos del siglo XX, obteniendo el Premio Pulitzer en 1953 y allanando su carrera hacia el Nobel de Literatura, que recibió en 1954.
Comencé a leer El Viejo y el Mar por un grupo de amantes de la lectura al que me uní recién, y justo alguien pidió una recomendación de libro corto y surgieron muchos nombres, alguien mencionó este libro y que deberíamos de hacer la dinámica de leerlo todos. Acepté. No tenía muchas ganas de hacerlo, leí la sinopsis y no me pareció atractivo en lo absoluto, pero decidí darle una oportunidad, y que buena decisión.
El viejo y el mar nos cuenta la historia de Santiago, quien es un pescador en La Habana que lleva 84 días sin pescar nada, sale todos los días de madrugada y regresa por la tarde con su bote vacío. Anteriormente tenía a un chico quien lo ayudaba, pero la familia de este a ver que no pescaba nada le prohibieron salir con él pues dijeron que el viejo tenía muy mala suerte.
En el día 85 sin pescar el viejo creyó que ese día su suerte tenía que cambiar, se hizo a la mar y se alejó de la costa demasiado.
Es un libro maravilloso, realmente me sorprendió gratamente pues no me imaginaba que pudiera llegar a gustarme tanto. El personaje del viejo está muy bien construido y rápidamente hace que desarrolles empatía por él y su situación tanto en alta mar como la que vive en la aldea. Está realmente muy bien escrito y es increíble todo lo que logra transmitir solo con un personaje. El final me hubiera gustado mucho más dulce, pero entiendo que las posibilidades de que algo como lo que yo esperaba le quitarían por completo la credibilidad.
La manera en la que está narrada te introduce realmente en la situación y aunque el argumento de primera impresión pueda sonar aburrido, para nada lo es. A lo largo de todo el desarrollo de los hechos te vas adentrando más y más en la piel del viejo, compadeciéndolo y admirándolo por su valor y su manera de ver la vida y a su amado mar.
He de confesar que se me llegaron a llenar mis ojos de lágrimas cerca del final de la novela.
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