Huérfano, relojero y ladrón. Hugo vive entre los muros de una ajetreada estación parisina de ferrocarriles. Si quiere sobrevivir, nade debe saber su existencia. Sin embargo, un día tiene un descuido y es descubierto por una excéntrica chica, amante de los libros y por un viejo y amargado juguetero. Y ya nada será como antes.
La invención de Hugo Cabret es un libro realizado por Brian Selznick, quien nos presenta una nueva forma de contar historias, pues este libro está escrito e ilustrado de forma bellísima, donde las ilustraciones juegan un papel súper importante, pues también cuentan la historia; es decir, aquello que vemos ilustramos no es meramente decorativo, sino que forma parte de la narrativa del libro. La invención de Hugo Cabret es una preciosa experiencia tanto visual como de lectura.
Hugo Cabret es un niño huérfano que vive escondido en los pasadizos secretos de una estación de trenes Montparnasse en París, Hugo vive oculto, pues si alguien llega a descubrirlo lo enviarán a un orfanato y él no tendrá la posibilidad de concluir con su proyecto. Un autómata que estaba creando su padre y Hugo cree que al terminar de armarlo este revelará un mensaje que su padre le ha dejado.
Pero Hugo no siempre fue huérfano, vivía con su tío, quien era el encargado de dar mantenimiento a los relojes de la estación, pero un día desapareció dejando a Hugo solo, Hugo se encargó de darle mantenimiento a los relojes a partir de ese día para evitar que se dieran cuenta de la ausencia de su tío.
La reparación del Autómata requiere de piezas, así que Hugo se ve en la necesidad de conseguirlas y esto implica robarlas, sobre todo de una tienda de juguetes, desafortunadamente es descubierto. Y es aquí donde pierde una de sus posesiones más preciadas, el cuaderno con las anotaciones de su padre con el que Hugo se guiaba para la reparación del autómata. Esto lo lleva a necesitar la ayuda de una niña amante de los libros y de su abuelo.
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