Leyendo una sinopsis parecida a la que he colocado aquí, me entraron unas ganas desenfrenadas de leer Lolita, pues parece, de acuerdo a la sinopsis que este libro tiene todo lo que un lector podría querer. Así fue como caí en este libro.
El libro nos narra en primera persona la vida de Humbert Humbert, un hombre atormentado por su gusto por las nínfulas (niñas prepúberes) y como a lo largo de su vida este ha sido un gusto que no ha podido erradicar, pese a sus muchos esfuerzos.
Humbert es un francés que realiza un viaje a Estados Unidos para trabajar en una universidad, el viaje lo realiza comenzando el verano para así tener la oportunidad de escribir un libro sobre literatura. Al llegar a su destino, se topa con que la casa donde iba a quedarse se consumió en un incendio y se ve obligado a hospedarse en casa de Charlotte y es aquí donde conoce a Lolita y empieza realmente su senda de sufrimiento.
Al comienzo del libro, puedo decir que me pareció bastante entretenido y desarrollé cierta simpatía por el pobre de Humbert y sus inocentes esfuerzos por acercarse a Lolita y reí con sus interpretaciones de los gestos que ella hacía. Llegué a odiar a Lolita por ser tan pesada, caprichosa, darle alas y luego mandarlo al demonio. Mi problema con este libro comenzó cuando ellos iniciaron un viaje en carretera por el país. El simpático Humbert se vuelve un obsesivo paranoico que cree que todo mundo está detrás de él para robarle a Lolita.
Este libro me pareció interminable, me tomó 5 meses leerlo y en realidad en el final me perdí un poco, no supe en que momento se habían cruzado con ese personaje. Imagino que fue en un momento en el que yo suplicaba que terminara.
Sé que es un clásico, considerada por muchos como una obra maestra de la narrativa. Yo simplemente sufrí este libro.
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